Crema de calabaza
La crema de calabaza es una receta que no puede faltar en vuestro menú semanal por dos razones: es súper fácil de hacer y muy ligera. Y a esto se suma que se puede comer fría en verano y caliente en invierno, de primero para comer y como plato único para cenar.
Esta receta es muy económica y práctica, ya que de ella salen grandes cantidades de crema que puedes congelar, si no te vas a comer ese mismo día. Además, es un un plato muy sencillo, delicioso, nutritivo y saciante, que se prepara en 30 minutos con ingredientes que puedes encontrar en cualquier supermercado.. Por último, es muy reconfortante, sobre todo en los días más fríos de invierno, en los que nada entra mejor que un plato bien caliente.
Ingredientes:
- 400 gr de calabraza
- 3 zanahorias
- 3 patatas pequeñas
- Medio litro de bebida de almendras
- Media cebolla
- Pimienta negra
- Nuez moscada
- Una pizca de sal
- Aceite de oliva
- Agua
Pasos de elaboración:
- Pelar y trocear la cebolla, las zanahorias, la patata y la calabaza.
- Añadir dos cucharadas de aceite de oliva en una sartén y sofreír con la cebolla.
- Añadir a la sartén las zanahorias y las patatas cuando la cebolla esté dorada.
- Cubrir con medio vaso de agua y dejar en la sartén durante cinco minutos.
- Poner la calabaza y la bebida de almendras junto con la pimienta, los cominos y la sal.
- Cocer a fuego lento durante 20 minutos.
- Apagar el fuego y poner toda la mezcla en un recipiente.
- Triturar todo con la batidora hasta que quede una composición homogénea.
- Añadir nuez moscada.
¡Y a disfrutar de un plato bien sabroso!
